QUERIDA AMIGA

Querida amiga:

No sé que voy a hacer ahora que tu nombre es un recuerdo.

No sé que voy a hacer cuando el sonido de tu voz se
vaya diluyendo en mi memoria.

Te tengo en mi vida desde que tengo uso de razón, siempre conmigo, incluso siempre fui detrás de ti , en la lista de la escuela, tú la s, a...
y yo la s, e...
Sentada en clase, detrás de ti, observando ese destello diferente que te rodeó desde siempre.


Querida amiga, tengo que decirte ahora lo que quizás nunca te dije:

Amiga, hay muchos recuerdos que acuden a mi cabeza cuando pienso en nuestros años infantiles.
Tú , yo, a las tres de la tarde, yendo a casa de Don Angel, nuestro maestro, aquél trabajo que hicimos juntas para el instituto, ( siempre pensamos que nos merecíamos ganar el premio), nuestros primeros tacones,...No recuerdo haber jugado contigo, tú y yo hablábamos , no jugábamos.

Siempre has estado en mi vida, en la niñez, en la juventud... A veces he pensado que cuando murió tu madre, no estuve a la altura... Perdóname ahora si fué asi, eramos jóvenes , yo acababa de perder a mi padre y ni siquiera sabía hacia donde tenía que andar.

He visto tu adolescencia, tú la mía, tu noviazgo, tú el mío. Estuviste en mi boda , como yo en la tuya, en los nacimientos de mis hijos, como yo del tuyo.

Tu hijo... , sé que un hijo necesita tener a su madre más tiempo para crecer, pero el tuyo tiene la suerte de tener unos buenos padres, y a su padre lo tiene ahí, no sufras por él.

Tú, siempre tan preocupada por mi s
alud... y yo que nunca imaginé esto...




Querida amiga, creo que nunca te dije que tenías elegancia. Te sienta el pañuelo en la cabeza como a nadie.

Cuando te lo ponías para bajar a la playa me encantaba observarte, me parecías una actriz de vacaciones en Montecarlo


Me fascinaba oirte hablar de trapos, siempre sabías lo que iba bien en cada ocasión


Me gustaba mirarte las manos, porque siempre me ha parecido que las tenías muy bonitas.Cuando nos despedimos, no dejé de
tocarlas, no quiero olvidarlas.

Querida amiga mía, te mentí aquel día que nos llamaste para despedirte de nosotros , para siempre; tú me dijiste que en ocasiones , perdías la fé, y yo te dije que no había que perderla... te engañé , yo también sentía lo mismo.


Querida amiga, esa dignidad y elegancia tuya , te acompañó hasta el final. Tuviste una sonrisa para todos, supiste quedar elegante, como siempre has sido.

Amiga, nos decías que porqué te h
abía tocado esto a ti. Con todo el dolor de mi corazón te tuve que consolar con palabras que mi corazón le cuesta aceptar..., no és un castigo amiga... es una loteria, una nefasta loteria...¿ pero porqué a ti?...

Cada persona que forma parte de la vida de uno, és como un libro de consulta. Yo ya he perdido dos grandes libros y he comprobado el vacío que se siente cuando ya no están aquí para hacerles consultas , preguntas vanas, pequeñas dudas en mis recuerdos ...

Tú eres un gran capítulo en mi vida, son muchas cosas las que te llevas contigo, cosas que nunca podré preguntarte para q
ue me ayudes a recordar.

No obstante, me quiero quedar con el recuerdo de esa fiesta , en tu cuarenta cumpleaños, la felicidad de aquel día , las fotos de todas las amigas juntas.

Me quiero quedar con tus palabras, cuando te dije que yo no iba a hacer nada especial en mi cuarenta cumpleaños.

Te enfadaste y me dijiste que era un motivo para celebrar. Y tenías razón, porque he comprobado que nunca sabemos cuantos cumpleaños más podemos cumplir. Y que cada día hay que vivirlo como si fuese a ser el último.

Quiero quedarme con los mom
entos felices vividos todos juntos, en la casita del faro.

Tú y yo en la cocina, mano a mano, felices...

Quiero quedarme con que sé q
ue te hicieron y fuiste feliz.

No quiero ni pensar cuantas cosas habrán pasado por tu cabeza en tus últimos días, y en el sufrimiento que mirándote a los ojos pude ver.

Y ahora amiga, no sé como terminar esta carta para ti. No quiero dejar de hablar contigo, no lo haré.


Seguiré recordando tus manos, tu manera de ser, tu manera de hablar , a toda tú.

No te dirémos adiós.