TARTA PEZ, JAVI CUMPLIÓ OCHO AÑOS

Javier cumplió ocho años .

Al escribir esta entrada me he dado cuenta que soy un poco pesada hablando de mis hijos, y que todas las tartas , o casi todas, son de celebraciones y cumpleaños de ellos, y que en todas me extiendo contando cuanto los quiero.

No es mi intención contar aquí simplemente eso, porque eso, no sería nada fuera de lo normal.
Todas las madres sentimos que tenemos hijos maravillosos, y con toda seguridad, lo son.

Mi intención es dejar aqui escrito, a modo de diario, esas pequeñas cosas que ahora percibo de él, y que pasados los años se diluyen en la memoria.

De hecho ya me pasa, y confundo cosas de cuando eran pequeños, entre su hermano y él.

Javi es muy alegre, es todo vitalidad. Es poco cerebral y todo sentimiento.

Un día normal transcurre de este modo:

Le doy un beso, otro , muchos , seguidos, cosquillas, no reacciona, se hace el remolón, no abre los ojos pero sonrie. Más cosquillas, -Javi, es tarde , no es el momento de jugar, el tete llega tarde , Javi... Ja - vi - er !!!- Tirón de la pierna, lo pongo de pie, se descojona de la risa.

Se levanta, siempre con una sonrisa, nunca tiene un mal gesto a la hora de ir al cole, y eso que se tiene que levantar una hora antes, porque tenemos que acercar al instituto a su hermano mayor.
Nunca , nunca se ha quejado para ir al colegio, de hecho... es que nunca se queja.

Me gusta observarlo cuando sube al colegio. En el trayecto hasta la puerta, cruza el patio donde hay pintado en el suelo una rayuela.

Todos los dias corre hacia arriba con su mochila-carro y ... un, dos a la pata coja, tres, cuatro y cinco , abre las piernas, seis, vuelta a la pata coja, siete, ocho abre piernas, y nueve fin de la rayuela.

Así día tras día. Al entrar y al salir.

Me gusta cuando sale y lo recibo, y nos besamos , y me pregunta ¿hoy que comeré mamá? y siempre encuentra rico le diga lo que le diga. Otra cosa es que luego se lo coma...

A menudo le pregunto,- Javi, ¿éres feliz?-. - Si , mucho!!

Tenemos nuestro beso de buenas noches especial y le gusta que le haga cosquillas antes de dormir.

- Dame el beso de la vaca.

- Marrano, siempre igual.

- mamá... dame el beso de la vaca porfiiiiiis ...

No me gusta que me pida ese beso, prefiero sorprenderlo y dárselo cuando no se lo espera.

El beso de la vaca es un lametazo en la oreja, al que acompaño con un beso sonoro que lo deja sordo por unos segundos.
Finjo cara de asco por probar la cera de su oido y entonces es completamente feliz. Y yo también.


Y ojalá sea siempre asi.



Este año hice la Tarta Pez de Cristina , y su blog Driwrgy cocinitas. Aunque ya la he visto en varios blogs, yo se la vi a ella por primera vez y por eso le doy las gracias a ella.

La tarta en si es sencilla, la típica de galletas y chocolate pero yo usé tres bases de bizcocho de las que se venden para hacer tartas.

La decoración es el único detalle a destacar de una tarta sencilla, que he repetido en otras ocasiones, pero que a los chicos les encanta.





Javi, al soplar las velas exclamó...- ¡¡Un aplauso para la cocinera!!

Y que queréis que os diga ... a mi me cayó la baba.



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