La quiché es originario de Francia, y básicamente consiste en una tarta salada con base de masa quebrada, que admite variedad de ingredientes. La más famosa es la quiché Lorraine, pero podemos prepararla de mil maneras.
Yo preparé la mía con calabacín y queso de cabra, y la combinación es muy rica.
Esta quiché,como digo, es una auténtica delicia, es sencilla de preparar y me viene estupendamente para el vegetariano que tenemos en casa.
Necesitamos:
- dos calabacines
- cuatro huevos
- una cebolla tierna
- una lámina de masa quebrada
- 200ml de nata
- 100gr de queso rallado
- queso de cabra de rulo
- una cucharadita de sal
- unas pizcas de pimienta y nuez moscada.
Picaremos los calabacines y la cebolla en pedacitos muy pequeños y lo pondremos a rehogar en una sartén con un poco de aceite.
Una vez lo tengamos, escurrimos el aceite y reservamos.
Mezclamos el calabacín y la cebolla con el queso rallado, la nata, la sal , pimienta, y nuez moscada.
Batimos los huevos y mezclamos con lo anterior.
Extendemos la masa quebrada sobre un molde desmoldable , colocamos encima un poco de papel de alumínio y sobre esté unas legumbres.
Horneamos la masa a 180º unos diez minutos.
Sacamos del horno, quitamos el papel con las legumbres y vertemos la mezcla.
Sobre la mezcla ponemos unas rodajas de queso de cabra e introducimos en el horno, a 180º unos 15 minutos más.
Dejamos enfriar antes de servir.
Espero que os guste.