Hoy os traigo un plato delicioso y típico de nuestras únicas y maravillosas Islas Canarias, y que me dió a conocer mi querida amiga Carolina del blog Tomillo, laurel y otras cosas de comer.
Si no la conocéis, cosa que me extraña muchísimo, os emplazo a que la visitéis, que si sus recetas saladas son estupendas, su mano para las tartas es ya, fuera de serie
Para la época de Cuaresma viene perfecta pues es pulpo, y para los que la Cuaresma no les motive, también será perfecto pues os aseguro que el plato es para hacerle un monumento .
¡¡Vamos con él!!
Ingredientes:
- pulpo cocido (yo lo compré ya cocido)
- un bote de garbanzos cocidos
- un pimiento verde pequeño
- una zanahoria
- dos cazos de tomate triturado en conserva
- una cebolla
- dos dientes de ajo
- patatas
- una cucharadita de perejil seco
- un chorrito de vino blanco
- un poco de tomillo
- una hoja de laurel
- una cucharadita de pimentón dulce
- sal
- aceite de oliva
Lo primero que haremos será picar en pedacitos pequeños los dientes de ajo, la cebolla y el pimento.
Rallamos la zanahoria y reservamos.
Rehogamos en un poco de aceite toda la verdura y cuando lo tengamos todo bien blandito, añadimos el pimentón, lo rehogamos y añadimos el tomate triturado.
Después añadimos el vino blanco , el tomillo y el laurel y dejamos que cueza y reduzca.
Las patatas las pelaremos y las troceamos friéndolas a fuego suave primero para que se cuezan, subiendo después un poco la temperatura.
Las colocamos sobre papel de cocina para absorber el aceite sobrante y reservamos.
Lavamos los garbanzos cocidos y los sofreimos en una sartén con un poco de aceite.
Ponemos en una cazuela las patatas, los garbanzos y el pulpo cortado con la tijera en rodajas.
Agregamos el sofrito anterior y el perejil picado (en mi caso seco) y removemos todo bien.
Ya tenemos el plato listo para saborear, ¡¡rico riquísimo!!
Le doy las gracias a mi compañera Carolina por darme a conocer esta receta, que sin duda alguna repetiré.
Espero que os guste.