Cumpleaños + RECETA: Mousse de chocolate coronado con pecado de nata

¡Hola!
Pues no, hoy no es la picapusa la que publica. Hoy es su hijo, el mayor. Sí. Ése.
Que no sé si lo sabíais, pero hoy es el cumpleaños de mi madre (en realidad es mañana), y como soy un ninja y jaquer, pues me he colado en su ordenador para publicar ésto.

Así que felicidades. Los dieciocho te sientan genial.
Pero ésto no termina aquí, porque este año es especial, y es que resulta que no todo siempre puede ir bien, aunque como has podido ver, todo esfuerzo da su fruto, y al final todo acaba mejorando... Pero qué te voy a contar, si esas cosas me las has estado enseñando desde que me caí de culo y luego pude ponerme de pie yo solito por primera vez, literalmente.
Y no es por quitarle mérito a mi padre (el cual tiene mucho, y también me ha enseñado cosas fundamentales), pero hoy es tu día, así que va dedicado a ti, que siempre has estado ahí. Eres la primera y hasta ahora la única mujer que ha cumplido lo que me ha prometido, que sigue confiando en mí, y sé que no hay otra que me pueda querer más que tú. Que aunque no quieras entender todas mis bromas (porque las entiendes todas, pero te callas la risa porque así me puedes llamar friki), congeniamos muy bien, y has hecho un buen trabajo: que aunque no te lo creas, ya no soy ese niño tímido que no quería hablar con nadie, que tengo mis dificultades pero sé afrontarlas solo y sé cuando debo pedir ayuda, que no soy inútil, aunque a veces te enfade y me lo llames...
Aprendí mucho, de muchos y tanto de papá como de ti, y que si hay algo de lo que puedes estar orgullosa es de haber sido una buena mentora. Así que pensé en escribirlo aquí, para que todo el mundo supiera que entre todos esos premios de blog que tienes en los banners, tendrías que tener el premio a la mejor madre del mundo. La supermamá capaz de llevarlo todo a cuestas, aunque tiene que aprender a repartir el peso entre los tres burros que cuida. :)

Todavía me quedan muchas cosas que decirte, pero he encontrado una canción que podría decir que se aproxima a lo que quisiera decirte, aunque ni de lejos lo podría resumir... Así que, aunque sé que no es tu género favorito, podrías dedicarle unos minutos a escucharla:

Y no lo olvides: Hay cosas que requieren un sacrificio, pero normalmente la recompensa suele ser grande, y las cuestas son menos empinadas cuando no las subes sola.

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Bueno, después de esto, para no perder el ritmo del blog y para toda esa gente que dirá ahora mismo "pues sí, genial nene, quieres a tu madre, pero yo he venido a ver cómo coño cuezo las cañaíllas", voy a atreverme a escribir una receta de cocina que, después de varios ensayos con otros platos, he logrado realizar exitosamente. Es mi primera receta publicada en blogs, así que sed permisivos y no seáis demasiado duros conmigo en cuanto a las críticas, por favor.

 RECETA: 
Mousse de chocolate coronado con pecado de nata

Bueno, pues como dice el título, voy a hacer eso.


1º Paso, abre tu nevera más cercana y coge un mousse de chocolate con nata. No te preocupes, si no dispones de eso, puedes adquirirlo casi sin complicaciones en tu supermercado(na) más cercano.
(Nota: He intentado ocultar, a mi parecer exitosamente y de manera profesional, la marca de la mousse, ya que no es objetivo de este blog hacer publicidad a los proveedores de alimentos)


2º Paso, destapa el envase del siguiente modo (si tu envase es cuadrado, redondo, o de otra forma, procede de igual modo, no hay problemas de compatibilidad).


3º Paso, introduce una cuchara de postre ( o más pequeña que las de sopa). En realidad, no sé por qué se llaman cucharas de postre, si las puedes usar cuando quieras. 


4º Paso (OPCIONAL), remueve la nata con el chocolate hasta que el color parezca una de esas veces en las que no has podido cagar en todo el día, y cuando lo haces sale el tapón de mierda duro y luego todo es blandito.


5º Y último paso, EL MÁS IMPORTANTE: ¡Sé limpio/a con el medio ambiente! 


¡Eso es todo! Espero que os haya resultado útil, que paséis un buen día, y todo eso.
Besis.
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