Este verano tan agobiante y caluroso está llegando a su fin, cosa que me alegra infinitamente, entre otros motivos por que volvemos poco a poco a llenarse la blogsfera de recetas y se nota la vuelta a la rutina y la normalidad.
Mi cocina, como habéis podido comprobar, no ha cerrado por vacaciones, y aunque con algo menos de actividad, he publicado recetas con bastante asiduidad.
Aún asi, me quedan por publicar muchas recetas refrescante y veraniegas que he preparado en estos meses.
Algunas tendrán que esperar para ser publicadas más adelante o el verano que viene, pero este helado es tan rico y queda tan bien como postre, sea cual sea la fecha, que no he podido esperar más para publicarlo
Lo tiene todo, es sencillo de preparar, y resulta perfecto para finalizar una cena o una comida.
Helado de mascarpone y limón
Necesitamos:
- 200ml de nata para montar
- una cajita de mascarpone (unos 250gr)
-un yogurt griego
- un bote pequeño de leche condensada
- cuatro claras de huevo
- una pizca de sal
- un vasito de zumo de limón (150ml)
- la ralladura de un limón
Elaboración:
*Mezclamos en un recipiente la leche condensada con el zumo de limón, la ralladura y el yogurt.
*Montamos la nata
*Montamos las claras de huevo a punto de nieve con la pizca de sal
*Integramos suavemente la mezcla de leche condensada, zumo y yogurt con la nata , y hacemos lo mismo con las claras montada a punto de nieve
Introducimos toda la mezcla en un recipiente amplio en la nevera y a las dos horas, moveremos la mezcla.
Transcurrida una hora más, volvemos a mover la mezcla, esto se hace para romper los cristales que se producen con la congelación, y ya lo ponemos en el recipiente definitivo para que congele.
Y tenemos nuestro helado listo para disfrutar.
Espero que os guste.