La receta de hoy es de las tradicionales, de las de toda la vida, de las de "sin misterio ninguno"
Y da igual, os la tengo que mostrar porque es una manera estupenda de comer calabacín sin que nadie proteste, NADIE.
Cuando digo nadie me refiero a mi hijo Javier, ese chaval tiene un filtro en el paladar y descubre el calabacín entre mil cosas más. Hasta ahora...
Yo hago puré de lo que sea y ya le cuesta comérselo, pero si le pongo sin que lo sepa, un calabacín, que digo uno, medio, que digo medio...¡¡ dos rodajas!! , el niño lo detecta a la primera y te dice... "no se que lleva este puré pero no es como las otras veces, tiene algo que no , que no , que no puedo con él"
Y tú te enciendes, pero no dices ni pio, pero te enciendes porque SABES que el puñetero niño ha detectado el calabacín... y le dices "pues es como siempre", el niño insiste... "pues no me sabe como siempre" Y mientras nosotros nos comemos casi todas las semanas nuestro puré calentito de calabacín con un quesito dentro , el niño no consiente ¡y no consiente!
Pero eso ha pasado hasta hoy, hasta el preciso momento que hice este bizcocho
La receta se la vi a mi compañera Mari del blog Marron glacè, ella hizo una coca de llanda con puré de calabaza, típica por la zona de levante, que igual podemos hacerla con zumo de naranja como con puré de boniato
Y se me encendió la lucecita... puré de calabaza... Toñi mete puré de calabacín y prueba con el puñetero niño.
Evidentemente no es la misma cantidad de calabacín que cuando tomamos un puré , pero... quise hacer la prueba, ¡¡y coló!!
Tengo que confesar que el ponerle unas pepitas de chocolate fue para que me ayudase al "camuflaje", pero tengo que decir también, que sin pepitas tampoco lo hubiese notado, porque además como se ve en el corte, las pepitas sólo están por la superficie.
Conseguimos un bizcocho esponjoso y jugoso, de un ligero color verde , como veis, ya que dejé incluso un poquito de piel en el calabacín.
Nadie, repito, NADIE notará que lleva calabacín.
Ingredientes:
- 270gr de calabacín previamente cocido, escurrido de agua.
- 3 huevos
- 180gr de azúcar
- 3 sobres dobles de gaseosa
- 150gr de aceite de girasol.
- 300gr de harina
- dos cucharadas de azúcar y una de canela en polvo (para la superficie)
- dos cucharadas de azúcar y una de canela en polvo (para la superficie)
Batimos los huevos con el azúcar hasta que blanquee
Añadimos el aceite y el calabacín cocido triturado y seguimos batiendo
Mezclamos la harina con los sobres de gaseosa y lo tamizamos. Vamos agregándolo poco a poco a la mezcla anterior.
Forramos un molde con papel de horno, en este caso una llanda, o recipiente rectangular
Vertemos la masa en el molde y vamos echando por la superficie las pepitas de chocolate. Además espolvoreamos con azúcar mezclado con canela
Vertemos la masa en el molde y vamos echando por la superficie las pepitas de chocolate. Además espolvoreamos con azúcar mezclado con canela
Horneamos con el horno precalentado a 180º hasta que pinchemos y salga el pincho limpio, unos 20 minutos.
Espero que os guste y os atreváis a usar el calabacín en dulce.
