Nunca había cocinado con plátano macho, aunque siempre lo he visto en el supermercado y lo he mirado con recelo.
Es originario del sudoeste asiático, pero su cultivo se extendió a muchas regiones de centro américa y Sudamérica. Y es allí donde se usa mucho el plátano macho o plátano de guisar, o hartón como también se le conoce.
Siempre se usa cocinado, como la patata o cualquier otro tubérculo, bien sea asado, cocido y frito y con él se elaboran diferentes platos a cual más original, además en algunos paises tropicales, se usa su pulpa deshidratada para elaborar una harina con la cual se hace un pan de alto valor energético.
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A raíz de atreverme a preparar los patacones este verano, me di cuenta de que en los plátanos macho había todo un mundo por descubrir.
Por su textura y composición, se pueden usar como sustituto de la patata, pero por el sabor peculiar, podemos usarlos para darle un toque exótico a las recetas tradicionales, así que me puse a experimentar.
De los experimentos salieron estas croquetas. Tienen el toque ligeramente dulzón del plátano y el toque salado del jamón al cocinarlo, una combinación deliciosa y original que os aseguro triunfa.
El toque exótico del plátano y el toque español del jamón serrano hace que este entrante sea toda una fusión hispano-americana.
Para las croquetas necesitamos:
- dos plátanos macho
- 150gr de jamón serrano picadito
- un huevo para rebozar
- harina para rebozar
- pan rallado para rebozar
- aceite para freir
Lo primero que haremos será pelar los plátanos y trocearlos en tacos de unos tres centímetros.
*Freimos los tacos de plátano , moviéndolos para que se frían por todos lados, hasta que estén ligeramente doraditos.
*Cuando los tengamos todos fritos, los aplastamos con ayuda de dos platos de postre envueltos en film (para que no se nos pegue el plátano)
En esa especie de tortita blanda de plátano, pondremos un puñadito de jamón picado y con las manos le daremos la forma de croqueta.
Una vez hechas todas, las pasaremos por harina, huevo y pan rallado.
*Las freiremos como si de croquetas normales se tratasen.
Yo las presenté sobre una rodajita de pan, con una rodajita de tomate, en forma de pincho
¿Os apetecen? Espero que os hayan gustado tanto como a nosotros.
