El invierno nos trae unas verduras deliciosas como son las coles y las coliflores.
A mi en particular me gusta mucho el romanesco, que es de la familia de la coliflor o del brócoli, pero de sabor más fino y mejor digestión que sus primas.
El romanesco está rico en ensalada, tal cual, aliñado, y también por supuesto, cocido.
En esta ocasión lo preparé gratinado, que aunque es más calórico, la verdad es que está delicioso.
Ingredientes:
- un romanesco pequeño
- 100gr de taquitos de jamón
- agua, sal para cocer
- dos cucharadas de harina
- leche
- pimenta y nuez moscada
- queso para gratinar
- dos cucharadas de aceite de oliva
Elaboración:
*Ponemos a cocer el romanesco con agua y sal, pero lo coceremos al dente, que se quede un poco entero.
Una vez cocido reservamos y rehogamos en una sartén con un poco de aceite de oliva los pedacitos de jamón, preparamos una bechamel ligera con la harina, una pizca de nuez moscada y otra de pimienta, un poco de agua de la cocción y leche.
*Ponemos en un recipiente pequeño apto para horno el romanesco, lo cubrimos con la bechamel con jamón, y encima le ponemos el queso para gratinarlo.
Al horno en posición grill unos minutos.
Listo para disfrutar.
Espero que os guste.